De repente

 

  

 

Ciertas cosas
nos llegan de repente,
cuando nadie las espera.
 
Puede que sea
el amor o la vejez,
la enfermedad o el éxito,
el exilio o un verso feliz,
un gran éxito o una tragedia,
la muerte o un boleto premiado.
 
En verdad poco
importa qué sean,
lo cierto es que nos golpean
como un rayo caído
de un cielo que no
amenazaba tormenta,
así,  inmisericordes,
cuando nadie las espera
y ya nada es nunca más lo que era.



Comentarios

Entradas populares de este blog